CorsariaBlog

9 de Julio de 2006

Un libro duro...

A veces el contenido de ciertas entradas nos llega por casualidad. Fue así como llegué a esta. La tv estaba encendida, salía la imágen de un argentino con su libro editado en la mano. Era la presentación en alguna localidad asturiana. No sabría decir que atrajo mi atención, pero seguí con interés la noticia. Firmaba ejemplares.

Me picó la curiosidad un detalle, una señora le llevó el libro impreso en cuartillas. Lo había descargado de internet y el se lo firmó amablemente. Mi bombillita interna se encendió, y en cuanto pude busqué el libro en la red. Primero localicé la editorial, luego conseguí la versión en pdf, descargable gratuitamente.

Así fue como di con esta historia, un relato duro, real, y que refleja una realidad que está ahí. Incluso en Asturias donde la inmigración no es tan amplia como otras zonas de España, existe la explotación. El autor del libro la sufrió en primera persona, y lo refleja en este libro.

Dejaré que el mismo lo diga con sus palabras.

"El viernes y sábado de esa primera semana nevó tan fuerte que, aún cuando ya estábamos listos para salir y metidos ya en la camioneta, decidieron que no se trabajaba. Nuestra felicidad fue mayúscula. Regresamos al frigorífico y dormimos hasta las once de la mañana. Luego nos enteramos que esos días se descontaban, con lo que a partir de entonces vivíamos cruzando los dedos para que no nevara nunca."

La dureza...

"Al día siguiente José dijo, desde la cama, que le dolía todo el cuerpo y que no iba a ir a trabajar, y al otro día se fue. Sus últimas palabras fueron: «Esto es un infierno. Yo me voy». Después nos contaban que es impresionante la cantidad de gente que pasa uno o dos días y se va. Otros duran una semana."

La corrupción...

"Ni bien asomaban los árboles aparecían zonas enteras quemadas, en especial durante el verano. Los gallegos de la empresa se frotaban las manos: «Para nosotros mejor. La gente quema, nosotros volvemos y plantamos». Se decía que tenían contactos y contaban con el guiño de ojo del Ayuntamiento y la Guardia Civil para emplear gente indocumentada, sin seguridad social ni nada. El hecho es que no recibían ninguna inspección, ni jamás se nos detuvo por nada en el pueblo o fuera de él. Nos transmitían un aire de absoluta impunidad, como si todo estuviera arreglado de antemano. De entrada me dio que pensar el hecho de que por ahí habían desfilado cantidad de inmigrantes y, al irnos nosotros, seguirían desfilando."

(gallegos = españoles)

Sólo a raíz de la publicación de este libro se tomaron ciertas medidas, casi todas de cara a la galería. El empresario sigue libre, aunque ahora parece que contrata inmigrantes con papeles.

Casi al final del libro cuentan como el jefe quiso convencer a uno de los inmigrantes rumanos para que trajese a su mujer a vivir con él y que la emplearía en el bar...

"¡Por doscientos euros mensuales!, cuando el salario básico aquí es de cuatrocientos cincuenta o quinientos. La van a explotar como a nosotros por chaucha y palito. En esto son hábiles, aunque no tienen ningún estudio. Se aprovechan del trabajo inmigrante barato y, en la práctica, incondicionalmente disponible, casi esclavo."

(chaucha y palito = por nada)

La belleza del paisaje...

"No sé dónde y cómo consignar un punto: la belleza del paisaje. Es difícil para mi transmitirlo en este contexto. A menudo, cuando no me veían o lograba esconderme detrás de los matorrales, me detenía un instante mientras trabajaba y contemplaba la ladera del frente o la cadena de montañas que se perdía al fondo, con sus picos nevados. Todo eso me maravillaba. Me sentía emocionado, aún en medio del cansancio, de estar allí frente a una naturaleza que, aún siendo árida, reseca, hostil, resultaba tan pero tan bella."

En fin, un retrato vivo de lo que a veces tenemos al lado, y que ignoramos. No se quien dijo una vez que se tiene miedo a lo que se desconoce. Quizás, solo quizás, de conocer en que condiciones viven y trabajan muchos de los inmigrantes los miraríamos con otros ojos.

Podría llenar líneas y líneas con reflexiones e ideas, pero creo que lo mejor es que cada uno lea el libro y saque sus propias consecuencias. Se lee relativamente rápido, son pocas págs. :)


Ficha:
Los árboles de la muerte. Crónica de un inmigrante sin papeles.
Marco Valle
Editorial: Cambalache. (Oviedo)
ISBN: 84-607-9379-6
Año de edición: 2004 (2ªedición).
96 páginas
Librerías que lo distribuyen.
Descarga gratis [pdf] 274KB.


Enlaces relacionados:
» El libro en la prensa (1).
» El libro en la prensa (2).

La foto:
» Una foto preciosa.. Una pena no tenga licencia CreativeCommons para ponerla aquí.


Escrito por corsario | 10:14 AM
Comentarios

Es curioso como la gente juzga a los inmigrantes sin pararse a pensar de dónde y por qué vienen aquí. Pero bueno, esa no es la historia ahora. Anotado para echarle un vistazo.

Gracias

Escrito por Lautreamont | 10 de Julio de 2006 - 09:25 AM

Imagino que no tiene que ser nada fácil dejar tu país y abandonarlo todo para marcharte a otro y empezar desde cero, en un lugar que no conoces, tan sólo quizás por comentarios de otros, buscando una vida mejor, que no tiene nada de malo pues todos lo queremos. Tiene que ser muy duro, empezando por las mafias, los empresarios corruptos, la gente que te rechaza... Podríamos pararnos a pensar un poquito si nosotros estuvieramos en su situación, no es fácil y que más quisieran ellos no tener que pasar por todo esto.

Escrito por Averia | 11 de Julio de 2006 - 09:34 PM

Lautreamont: es bien cierto e incluso en casos como el relatado en este libro se de personas que defendían al empresario. No se paran ni por un momento a ponerse en el lugar del inmigrante. Gracias a tí por el comentario y la visita. :)

Avería: A veces pienso que todos deberíamos ser emigrantes alguna vez para conocer otros países y personas. Quizás abriría la mente a muchos y sería más fácil entender a las personas que llegan. :)

Escrito por corsaria | 12 de Julio de 2006 - 01:13 AM

No soy estudioso de las leyes, pero segun veo, lo que creo que pasa es que muchos paises tienen leyes que pueden cumplir o no, pero la mayoria son para legalizar la inmigracion acomodada, media. No es para regular la inmigracion de los mas necesitados. Claro, de esos inmigrantes no quieren hacerse cargo los gobiernos.

Escrito por Ruben | 14 de Julio de 2006 - 08:01 PM

la historia es muy llamativa porque se enfoca en una ploblematica muy bien planteaeda ademas es muy curioso saber como las personas no son capaces de comprender que seamos como seamos somos iguale ademas que la nacionalidad en el mundo de hoy no vale.
esas actitudes son de personas poco concientes y poco autonomas.

Escrito por lina | 14 de Julio de 2006 - 11:15 PM

los imigrantes tambien tenemos derechos respeten¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Escrito por lina otra vez | 14 de Julio de 2006 - 11:18 PM

Rubén: lo cierto es que las leyes laborales a veces no se cumplen ni con los propios habitantes de aquí. Pero los inmigrantes, sobre todo si carecen de papeles, esto es que estén sin regularizar, son aún mas vulnerables frente a los patrones. Trabajan más horas y cobran menos, y tienen menos capacidad de negociación con su jefe. Y claro de eso se valen para explotarlos. Eso perjudica a todos, a los propios inmigrantes en primer lugar y también a los trabajadores locales porque es competencia desleal por parte del empresario.

Lina: La nacionalidad hoy por hoy sólo existe para las personas, para el dinero y para la mercancia no existe. Por otro lado mucha gente es muy hipócrita respecto a los inmigrantes. Todo depende de la clase social, si es un tipo con mucho dinero todos se desviven por ser amable con él. En cambio si no tiene nada y viene a trabajar ya no le tratan igual. Le tienen miedo a lo que no conocen pero si tiene dinero ya no le tienen tanto.

Escrito por corsaria | 16 de Julio de 2006 - 11:03 AM

Tienes razon corsaria, no es lo mismo un inmigrante futbolista del madrid o del barça que uno que llega en cayuco. Triste realidad.

Escrito por Jean Bedel | 23 de Julio de 2006 - 11:38 AM
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